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| Beirán se retira cabizbajo durante el partido. ACB-PHOTO |
El base tinerfeño se erige en protagonista en el tramo final para darle la victoria al Real Madrid (78-72)
Juan Pedro Borrego
El Gran Canaria se quedó sin oxígeno para alimentar su séptimo sueño copero. El número mágico de participaciones en una fase final, la ilusión y el aliento de la grada fueron insuficientes para doblegar al poderoso Real Madrid en el Pabellón de su Comunidad. El Granca no le perdió nunca la cara al encuentro, pero las limitaciones de piezas y el gran potencial del conjunto anfitrión, que se juega el honor de llegar a la final evitar ser igualado por su eterno rival, el Barça, hicieron reales las diferencias teóricas entre los de Pedro Martínez y Ettore Messina. El técnico italiano se encontró en la recta final con la excelente respuesta del base tinerfeño Sergio Rodríguez para sentenciar la victoria.
Empezó bien el Gran Canaria. Concentrado y sin complejos, llegó a tener una renta de ocho puntos, defendiendo de manual, sin faltas y anotando con fluidez en un primer cuarto que se disputó a la velocidad de la luz.
En el segundo parcial, el Madrid empezó a abusar de fondo de banquillo. Los amarillos notaron el peso de los minutos y la falta de refuerzos, mientras hacían encajes de bolillos para repartir los minutos entre sus pívots. Carroll sufría para sacudirse las fuertes defensas de Llull y Tucker, pero entre la nube de manotazos tenía habilidad para responder a las exigencias del choque, siendo el máximo anotador del mismo, con 11 puntos.
El Gran Canaria resistió en el tercer cuarto, con un parcial 17-17, llegando a tener la iniciativa en el marcador. Fue este el cuarto de las polémicas decisiones arbitrales como las que impidieron que los amarillos pudieran ser beneficiados con una falta antideportiva de Prigioni cuando Green se iba descarado a canasta con el marcador (56-48). Los triples de Llull y Carlos Suárez mantuvieron la integridad del Real Madrid cuando Carroll estaba muy maniatado, pero Wallace y Nelson tomaban la batuta anotadora amarilla.
A pesar de la pasión, el Gran Canaria decayó en el inicio del último cuarto. La frescura del Madrid era una losa y el tinerfeño Sergio Rodríguez se erigió en el protagonista ofensivo de su equipo para hacer inútiles los esfuerzos amarillos. Por séptima vez, el Granca vuelve a casa a las primeras de cambio y deja atrás otro sueño incumplido.
Datos a tener en cuenta:
El Gran Canaria ganó en rebotes: 31-30.
El Gran Canaria exprimió más el juego de equipo: 14 asistencias por 10 del Madrid.
El Gran Canaria defendió con menos faltas: 18-22
El Gran Canaria anotó más triples: 8-6
Y ahora que me diga nuestro gran arbitro internacional Juan Carlos Arteaga, que un presupuesto como el del Madrid no influye en un arbitro ACB, como muestra cuatro botones:
ResponderEliminar1º Falta inexistente al final del segundo cuarto a Carlos Suárez + 2 puntos para el Madrid.
2º Falta Antideportiva de Prigioni a Green: - 2 tiros libres y posesión para el Granca.
3º Falta inexistente sobre Llull, dos tiros libre cuando se le acababa la posesión: + 2 puntos para el Madrid.
4º Pasos señalados a Xavi Rey inexistentes y se le anula una canasta: - 2 puntos para el Granca.
Todo esto en momentos puntuales, que casualidad y los comentaristas de la tele flipando con las desisiones arbitrales.
Si sacamos las cuentas nos da un partido mucho más apretado y quién sabe.....