La derrota menos incómoda

Bramos. ACB-PHOTO

El Gran Canaria pierde en su visita a Kazan (67-64) en la primera jornada del Last-16 de la Eurocopa

Juan Pedro Borrego

Con el entrenador en el hospital tras ser intervenido por una lesión en la rodilla, y un largo viaje que culmina una semana fuera de casa, el Gran Canaria sufrió una derrota que se puede considerar como el mal menor. El comienzo de la fase Last-16 de la Eurocopa se preveía complicada, y más aún con los antecedentes previos al partido que corrían en contra de los intereses amarillos. El Kazan es el rival que se antoja de los más complicados de la competición; el viaje es demoledor; y la estancia fuera de la Isla del equipo restaba opciones de sorpresa visitante. Pero sólo tres puntos (67-64) fue la desventaja de los representantes isleños y deja abierta cualquier posibilidad de lucha por la primera plaza del grupo con los favoritos.

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El resultado del Gran Canaria ante el Kazan deja la sensación de que los de Pedro Martínez están atravesando por uno de sus mejores momentos de la temporada. La derrota luchando hasta el último minuto en la pista del Power Electronics Valencia, el triunfo con clasificación copera en la cancha del Málaga, y esta nueva derrota ajustada en Rusia dejan abiertas muchas ventanas para la esperanza de que el techo del Granca está muy por encima de lo que quizás se le podía presumir en el inicio de la temporada.

Jaycee Carroll volvió a ser la referencia ofensiva del equipo isleño con 22 puntos y aunque no hubo un jugador que tomara tantas decisiones en el lanzamiento como el escolta norteamericano, lo cierto es que salvo Beirán, el resto de compañeros participó de alguna manera en las anotaciones. Así fue que el Gran Canaria, agotando también su mejor recurso, la defensa, llevó el partido en Kazan a un punto de decisión imprevisible en los últimos segundos del choque. En ese instante llegaron las peores noticias, cuando el lanzamiento triple de Carroll que buscaba forzar la prórroga fue bloqueado por el pívot esloveno Hasan Rizvic, a la postre, el mejor jugador del partido.